Os dejé en lo de la publicación…
Al día siguiente de publicar en aquel periódico lo de La Guardia Blanca, empezaron a llegarme correos electrónicos a mi cuenta del periódico. Y también a la de mi jefe.
Había de todo en esos emails. Alguno presionando para que me sacaran de allí y no me permitieran escribir, acusándome de incendiaria y de querer una especie de revolución anarkista…
Pero en mi bandeja de entrada, había un par de ellos que destacaban. Eras personas relacionadas con cuerpos de seguridad, que veían cierto sentido en todo aquello, pero sobre todo, que podía ser viable. Le faltaban más que retoques…era evidente. Pero ahí, surgió el principio de todo aquello.
La semilla había tocado tierra fértil y se estaban dando las condiciones para que brotara.
En las siguientes semanas, mientras recibía más correos, me reuní con las dos personas que me habían contactado en un principio.
Uno era un coronel del ejercito que estaba cesado en ese momento por denunciar malas practicas. (Y lo cesaron a él).
Y el otro era un comisario de policía en la misma situación.
Estas dos personas, tenían muchos contactos a los que les fueron pasando mi artículo y se fueron agrupando en torno a esta idea.
Pero no solo estaban escribiéndome personas relacionadas con seguridad, también me escribían: fruteros, dependientes, profesores, gente de la sanidad, cámaras, actores, cantantes…
En un momento, mucha gente empezó a ver el potencial de la idea. Pero también había mucho que resolver si se quería llevar a cabo.
Por ejemplo, la financiación?? Si quieres ser independiente, no puedes permitir que sea el estado el que te pague. Porque ahí deja de haber libertad para señalar. Te juegas tu comida.
Yo ya había pensado en ese tema, pero legalmente, no sabía hasta que punto podría ser viable mi opción.
Para mi, lo más lógico era que la financiación saliera de los malos y sus propiedades. Esta gente, por lo general, llevan altos niveles de vida. Tienen negocios o muchos bienes, o ambas. Entonces, pasaría por vender o gestionar las propiedades, con expertos en esos temas, y sacar dinero para mantener el grupo.
Se que la teoría es más fácil que la practica y en este tema, mucho más.
Además en España, las leyes sueles proteger o favorecer a los malos. Por lo tanto, quedarse con sus bienes, no iba a ser fácil. Están muy protegidos en realidad. Los paraísos fiscales, ley de protección de datos..etc. Muchas leyes que parece que son para el pueblo, pero en verdad no.
Así que lo mirara por donde lo mirara, lo único que tenía claro, es que habría que operar al margen de la ley. No sería viable, levantar algo que cambiara la balanza a favor del pueblo, de forma legal.
Pues nada… de forma ilegal.
Dicen que no puedes jugar con la mafia, comportándote como un buenazo, porque te van a freír. Si juegas con la mafia, hay que ponerse a la «altura». (Jugar con las mismas reglas que ellos, vamos)
Afortunadamente, en el grupo que se iba creando, tanto de forma más interna, como externa… había mentes muy brillantes, muy preparadas, con muchas ganas y con las herramientas necesarias, para que ese borrador sobre La Guardia Blanca, pasara a ser una realidad…